Caso Sony: la Única Salvación es la Abstinencia

Si algo tenemos que aprender del ciberataque a Sony, es que todo lo que está en Internet es público. Cualquiera puede acceder a todo lo que publicas…. A todo. Sin importar los filtros de seguridad, la información en la red puede ser vista eventualmente.

Después de lo ocurrido en días anteriores, más todos los “incidentes” de fugas de fotografías íntimas de los famosos hacia la red, la utopía de poder borrar cosas suena cada vez más atractiva.

Hace unos días en la columna Bits del NYTimes, se analizó el caso de Snapchat, cuya función es borrar los mensajes (fotos incluidas) en un tiempo determinado por el usuario, una vez que han sido vistos por el receptor.

La única manera de no estar expuestos es abstenerse de publicar en Internet. Esto nos es casi imposible, por ello, apps como Snapchat y Confide –una versión enfocada a empresas y negocios- presentan lo que podría ser el futuro de la red. La pregunta que nos lanza el Wall Street Journal es clara: ¿Queremos vivir en un mundo en el que Internet tiene el estilo de Facebook o el de Snapchat?

Antes podíamos pensar que lo que subimos a la red, desaparecería en varios años –aunque no tuviéramos del todo claro qué pasaría con esa información. Ahora no tenemos esa posibilidad: con la tecnología de la nube, esos datos estarán “ahí” siempre.

Las ventajas que ofrece un modelo de red global de la que se pueda quitar, borrar por completo, la información suena cada vez más real y más deseable. No solo porque los artistas podrán enviar fotos sexys a quien quieran, sino porque puede significar un freno para el ciber espionaje que algunos gobiernos llevan a cabo.

Sin duda, estamos aún lejos de que este tipo de Internet predomine. Los principales afectados si esta tendencia se impone serían la industria de marketing, y Google, que tendrían que adaptarse a usuarios no fácilmente rastreables.

Todavía queda por verse si el futuro de la red será la permanencia o la fugacidad de los datos.

SWF/DF