¿Fueron extraterrestres quienes acabaron con el ATARI?

A principios de la década de los años 80s, Atari dominaba el mercado de las consolas de videojuego. Atari 2600, lanzada al mercado en 1977, era la máquina más popular en ese entonces. Consciente del éxito que podía tener una licencia como la del extraterrestre E.T. Atari llegó a un acuerdo con Steven Spielberg y Universal Pictures para crear un videojuego basado en la película ET. El éxito estaba casi asegurado.

Las prisas provocaron un cataclismo para Atari. La compañía se empeñó en lanzar el juego al mercado antes de la temporada de compras navideñas, asegurándose así un mayor número de ventas. Esto provocó que los desarrolladores contaran con tan solo 2 meses para realizar su trabajo. El resultado, fue malísimo. El juego de E.T. tenía malos gráficos, era difícil de entender y para colmo E.T. era verde en lugar de café.

Atari anticipó un gran éxito para el juego, produciendo 5 millones de cartuchos, cuando había 10 millones de consolas vendidas en el mundo. El título sólo logró el millón y medio de copias vendidas, y buena parte de ellas fue devueltas por los consumidores insatisfechos. Las ventas del juego no eran malas, pero la sobre producción de cartuchos hizo que Atari registrara pérdidas muy importantes.

En esa misma época, ocurrió algo parecido con otro de los candidatos a “peor juego de la historia”, Pacman (su versión de Atari 2600 fue mucho peor que el original), del cual se produjeron 12 millones de copias cuando, como hemos dicho antes, solo había 10 millones de consolas vendidas. Estos dos juegos son considerados como los principales causantes de la bancarrota de Atari.

Lo que ocurrió con las copias no vendidas o devueltas de E.T. es considerado por muchos como una leyenda urbana, pero es totalmente cierto. Incluso un grupo musical, Wintergreen, creó un videoclip sobre el tema. Esos millones de cartuchos fueron enterrados en el desierto de Nuevo México, en el vertedero de El Paso.